Lasoluci贸n a esto, es realizar la oraci贸n para comulgar sin confesarse, que te servir谩 por la sencilla raz贸n que Dios est谩 presente en todos lados y perdonara
Sino puede alejarse sin llamar gravemente la atencin de los dems, puede comulgar. haciendo un acto de perfecta contricin. Obviamente no es el caso de quien no quiere confesarse, sino de quien, de buena fe, se encuentra en esa situacin. conseguir que lo haga dignamente, evitando todo peligro de sacrilegio.
Hoyen d铆a, la extendida frecuencia en la recepci贸n de la comuni贸n, puede hacer pensar a muchos que, si no se comulga, no se puede subsistir cristianamente ni ser santo. Es como si hubiese un ritual que fuese as铆: se va a Misa, comienza la celebraci贸n, se leen las lecturas, llega el ofertorio, viene la consagraci贸n y, luego, si se est谩 en
Sepuede comulgar en estado de pecado grave solo si no es posible confesarse antes y existiera una 芦raz贸n grave禄 por la cual fuera necesario recibir la comuni贸n. En estos casos, es necesario 芦hacer un acto de contrici贸n perfecta, que incluye el prop贸sito de confesarse cuanto antes禄 (can. 916).
Decirde qu茅 se confiesan los seminaristas, equivaldr铆a a decir los pecados de los seminaristas, y de hecho que no es el punto de mi reflexi贸n. Primeramente, porque hasta ahora no he tenido la gracia de poder confesar a un seminarista; y segundo, no soy quien, ni para solo mencionar especulaci贸n alguna. Sin embargo, quiero referirme a algo
Recuerdocomo hace unos a帽os, era costumbre muy observada, despu茅s de comulgar, recogerse unos momentos de rodillas o sentados en oraci贸n con el Se帽or que se acababa de recibir, y tambi茅n, despu茅s de la bendici贸n final de la Misa, muchos fieles se quedaban prolongando la acci贸n de gracias. Hoy, es frecuente ver en la mayor铆a de los
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se puede comulgar sin confesar
